Tengo dos libros
compaginados, esperando publicación. En el año de 2009, recibí por
correo, un libro de mi autoría, que me fuera enviado por una lectora
que había bajado de internet los textos, y compuesto el ejemplar.
Confieso que esta posibilidad me alegra, ya que deja a los lectores y
lectoras, la libertad de hacer su propia selección de textos.
Inclusive pueden ponerlos como de autoría de otra persona, como ya
ha pasado. Sin embargo, sigo dándome al trabajo placentero de yo
mismo reunir escritos, en esa laboriosa tarea en la cual voy cosiendo
momentos y tiempos. El tiempo se detiene cuando estoy en esta
actividad. Ahora mismo tengo empezado otro libro, que es como si
estuviera construyendo una casa de hornero. Voy juntando los pedazos,
que son vivencias, experiencias, instantes detenidos en el tiempo.
Gente que vi o con quien estuve. Lugares que conocí. Ahora mismo al
escribir, vienen memorias de Ouro Preto, de Carapibus, de Mendoza y
de Montevideo, de Paraná y Pirpirituba, de Bananeiras y Coxipó do
Ouro. Voy cosiendo estos lugares y lo que viví y sentí en ellos.
Así el tiempo se unifica. Bibliográficamente.
segunda-feira, 19 de setembro de 2016
domingo, 18 de setembro de 2016
Confianza
Hoy estuve en el
Centro de Formação Missionária Pe. José Comblin, en Café do
Vento. Era la segunda vez que iba allá, con mi esposa y amigos. En
el camino, la palabra “confianza” me vino. Esto me trajo mucha
tranquilidad. Ahorita nomás, me vino otra vez esta palabra:
confianza. Parece oportuno recordarla, en estos tiempos que nos toca
vivir. En particular, en la reunión en pequeños grupos esta mañana,
me hizo bien saber que es posible atravesar situaciones muy
difíciles, y salir ileso. El encuentro de hoy me alegró por varios
motivos. Tal vez el principal, el énfasis que se le da al
conocimiento de experiencia, vivencial, en la educación continuada.
En esto convergen Adalberto Barreto –creador de la Terapia
Comunitaria Integrativa-- y José Comblin. Creo que esto es lo que me
sana en estos encuentros. Gente del campo y de la ciudad, las
trayectorias son parecidas. Los desafíos son comunes. En el fondo,
todos sabemos lo que nos hace bien y lo que necesitamos. Pero me hace
bien reforzar esto, no sólo en mi pensamiento, sino en el diálogo,
en la escucha de otras personas. También me alegra saber que
seguimos construyendo redes. Se van creando lazos. Proyectos en común
se van configurando. Común, comunidad, son palabras que escucho
frecuentemente. Uno afianza su identidad, al recordar sus orígenes.
Nos enraizamos en el aquí y ahora, colectivamente.
sexta-feira, 16 de setembro de 2016
Cantando
El canto de los
pájaros en la mañana que comienza. Primavera va llegando. El cielo
azul celeste claro, y las nubes coloreadas de un amarillo ceniza.
Tantos pensamientos a esta hora, pero también un silencio y una paz
que unen todo. Dejar que el día me vaya llevando o trayendo. Hay
cosas que hacer. Y el recuerdo de Lula ayer, diciendo su palabra al
pueblo. ¿Qué
me gustaría hacer? Ir a la verdulería y a la panadería. Un
programa que no me cansa. No me aburre. Serán las veredas y las
flores. El rumor
de autos y motos que andan por la calle. La farmacia, con su
presencia permanente allí en la esquina. Y los cuentos que iré
leyendo a lo largo del día, a lo largo de la vida. Un cuento que se
cuenta y canta. Va cantando uno de aquí para allá, a veces en el
corazón, a veces con son.
domingo, 11 de setembro de 2016
El quehacer que soy
“Zapatero a tus
zapatos,” solía decir mi madre. Es importante uno saber cuál es
su centro, cuál es su eje, a qué hemos venido a este mundo. Puede
ser algo muy simple. Un quehacer que nos hace, como el escribir. En
mi caso, es eso. De pronto me salgo y voy a lo macro, a lo político
y social. Pero me vengo rapidito a aquello que me hace, al lugar
donde respiro, donde me rehago, donde puedo ser el que soy. Aquí me
encuentro con mi ser más profundo. Aquí encuentro mi historia y soy
esa historia, la historia de una familia que vino del campo, de
pequeños poblados, y se fue haciendo con trabajo, desde abajo. Lo
político nos tocó desde siempre, pues no hay cómo substraerse.
Sobre todo mi abuelo paterno. Pero no puede ni debe haber una
disociación entre lo que hago y lo que soy. Escribir me reúne, y
esto para mí es primordial.
quinta-feira, 8 de setembro de 2016
Vencer, Brasil!
Todo este tempo de
caminhar ao lado do povo, com os setores democráticos e populares,
na defesa da democracia política e da justiça social, tem me
trazido nova energia. Algo de muito bom renasce de dentro da gente,
quando vamos mais uma vez, atrás daquilo que não pode nem deve ser
negociado. A liberdade, os direitos humanos e sociais, as conquistas
dos trabalhadores e trabalhadoras. Uma força intensa volta a me
animar, como quando, em outras épocas --e ainda hoje-- me empenhei
em atividades comunitárias e sociais em prol do desenvolvimento da
pessoa humana. Não se trata apenas de resistir ao golpe de Estado. É
isto, sem dúvida, mas é muito mais. É continuar a manter a fé na
decência, na justiça, no que é correto e nobre, o que é feito a
muitas mãos. O capitalismo não se combate apenas com discursos. Se
combate no dia a dia. No cotidiano, de muitas maneiras. Nesta hora em
que vejo renascer dentro de mim essa força do amor irrestrito, esse
amor que se costura minuto a minuto com as minhas raízes e se
projeta para um aqui e agora renovado, percebo que valeu a pena.
Valeu a pena ter insistido até aqui, e continuar insistindo. A
reação não vai vencer. Os parasitas deverão aprender a respeitar
a quem trabalha, a quem gera as riquezas e faz com que se movam as
rodas da história. Acredito que uma das grandes lições da
mobilização contra o golpe no Brasil, seja a de ter evidenciado que
o ser humano não se deixa explorar passivamente. Existe um algo
dentro de nós, que se rebela contra o atropelo e contra a violência.
Isso é sagrado, e deve ser mantido. Isso é o que nos poderá fazer
vencedores deste e de qualquer outro golpe.
terça-feira, 6 de setembro de 2016
Composición
Volver y no volver de Mendoza. Volver y haberme quedado. Ir
llegando de a poco y ya haber llegado a João Pessoa. Reencontrarme en el
paisaje urbano que me reconoce. El mar que debe estar allí afuera en la noche. Tener
adentro mío todas esas partes de mí que son mis hijas y mis hijos. Mi nieto. Mi
padre. Mi esposa. Mis hermanos. Mi familia más grande. Mis amigos. Saberme
hecho de esas frases, esas palabras claves que llegan en el momento justo, de
la manera justa. Y ahora ya entregarme a este placer tan antiguo como yo. Ir
juntándome, ir viendo lo que está aqui. El ser que soy. Adentro y afuera. Todo
tan cambiante, y yo ese todo también. Ya no soy solo. Soy uno.
Assinar:
Postagens (Atom)