Escribo para estar.
Para ser. Esta mañana andaba por el centro de Mendoza con María, y
me vino esta sensación. La de andar por mi lugar. Estar en mi lugar.
Es esta hoja que voy leyendo y escribiendo a medida que voy yendo y
viniendo. Entonces está todo bien. Aquí soy yo. Aquí están todos
mis afectos. Los amigos que he ido haciendo a lo largo del tiempo. Mi
familia. Mi fe. Los colores en los cuales me reconozco. Eternamente,
leo y escribo. Me leo y me escribo. Hago mío el mundo y me conecto
con todo lo que existe, escribiendo.
Nenhum comentário:
Postar um comentário