quinta-feira, 5 de março de 2015

Una tarde conmigo

Preparé un mate con hierbas serranas. El último que me quedaba. Jugo de acerola. Estuve un tiempo con  las telas y los caballetes. Rondando jazmines. Están aquí. Finalmente, leí algunas crónicas de Martha Medeiros, Feliz por nada. Aflojar. Soltar la presión interior. Dejarme ser. El manual de instrucciones que uno se impone a sí mismo. Gabriel García Márquez: El general en su laberinto. Disfruto la escritura y la lectura. Leo para gozar y descansar. Me acuerdo de mí. Pero un yo cambiante, sorprendente. Feliz y nuevo. Puedo leer sin intentar entender, y entonces entiendo viendo. Veo lo que entiendo. Veo la narrativa, lo narrado. 

Nenhum comentário:

Postar um comentário