quarta-feira, 2 de dezembro de 2015

Etílicamente

Tengo la impresión de que mi aprecio por el vino, en alguna medida se debe a que él me lleva a este estado en el que no sabemos muy bien qué es qué. Afloja la objetividad, esa cosa forzada que nos imponen y hemos aceptado por costumbre. Puede ser de otra forma, de otras formas. Todo puede ser diferente. La literatura y la poesía, me llevan a lugares así, donde lo posible ocupa el lugar de lo que uno pudo haber creído que era la realidad. La poesía y la literatura, el arte, la pintura, los colores, la belleza, me llevan a ese espacio singular. Lo bello. Un lugar donde puedo estar sin violentarme.  

Nenhum comentário:

Postar um comentário